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Viento de Levante

Esta semana pasada fue de lo más intensa, Levante = olas, buena compañía y todo el mundo contento.

El levante mayoritariamente en la Costa Catalana es sinónimo de buenas olas, si viene debes esperar a que pare un poquito el viento para que las condiciones sean de lo más favorables tenemos varias zonas bastante protegidas que nos permiten disfrutarlas en el máximo.

Cuando el levante aprieta, los primeros días nunca suelen ser demasiado buenos ya que es el inicio de la perturvación, sin embargo cuando las primeras olas llegan a la costa, estar dentro del agua, cuando aparentemente no hay olas, e ir viendo cómo estas van llegando en cuenta gotas, el tamaño de cada una de las olas se va haciendo mayor y la adrenalina empieza a subir aumentando los latidos del corazón, se obtiene una sensación de bienestar absoluta.

Para mucha gente el surf es un deporte diferente, no competimos sino que compartimos, tenemos la sensación de no querer parar nunca ya que sabemos que no dependemos de nosotros poder hacer o no surf ese día. La paciencia, el entender que por mucho que lo deseemos, ese día que nos hemos levantado a las 6 de la mañana para llegar al agua antes de ir al trabajo y ves como las olas no llegan, se te despierta el tuyo lado más rebelde, el enfado, la rabia… Todas estas emociones aprendes a controlarlas y convivir en un mundo mejor donde la gente aprende a entender que las cosas son como son. La adaptación desde los inicios de la especie humana ha sido uno de nuestros puntos fuertes, aprender a utilizarla nos hace ser más felices.

Un recorte de algunas de las sesiones de la Última Levantada.